Vidrio molido

Vidrio molido

Hay gente mala. Un paso más allá están los monstruos. Si Viviana Curvasic conociera a alguien así, no indagaría sobre sus condiciones morales: solamente preguntaría si el monstruo es gordo o es flaco. Faustina Aranda, por su parte, preguntaría si el monstruo está casado y tiene hijos. Y Cristian Reynoso, si se lo puede dejar escondido o no. Probablemente ninguno hubiese afirmado «El monstruo soy yo». En esta historia, sin que sea necesario agudizar demasiado la mirada, cualquiera podría serlo; de hecho, todos lo son. Y lo que es más terrorífico es que, como en la vida cotidiana, todos tienen sus motivos para serlo.

Esta es una historia que huele a vereda ancha, a una mañana soleada y a la casita de los abuelos. Pero puertas adentro el infierno se desata. Y cuerpos adentro, estalla.

 

Novedades en Editoriales Libro%

HABILIDADES DE CRIANZA PARA MADRES CON TRASTORNOS LÍMITE DE PERSONALIDAD: UN ENTRENAMIENTO GRUPAL

La vida de las madres con trastorno límite de la personalidad se caracteriza por...

LEEMOS Y ESCRIBIMOS TEXTOS

Leemos y escribimos textos es un material pensado para el...

AFASIAS. GUÍA BÁSICA PARA LA REHABILITACIÓN DEL HABLA Y DEL LENGUAJE

Esta guía ha sido estructurada para ser utilizada de forma ágil y práctica abordando...

SENTIR EMOCIONES ES NATURAL - PINIERI, ANTONELA

Un libro para encontrarse con las emociones. Los adultos pueden jugar y conocerlas...