Alfabeto saurio


—¡Pero esperá!
—¡Qué! ¿Qué te pasa?
—No podés comerme así nomás.
—¿Y por qué no?
—Porque mi familia no te lo va a permitir.
—¿Tu familia? ¿Y qué podrían hacerme unos pajaritos?
—No te equivoques. Mi familia es fiera y terrible. Y está llena de dinosaurios.
—¿Dinosaurios? No te creo.
—¡Pero esperá!
—¡Qué! ¿Qué te pasa?
—No podés comerme así nomás.
—¿Y por qué no?
—Porque mi familia no te lo va a permitir.
—¿Tu familia? ¿Y qué podrían hacerme unos pajaritos?
—No te equivoques. Mi familia es fiera y terrible. Y está llena de dinosaurios.
—¿Dinosaurios? No te creo.
—¡Ey! Los loros no mentimos; sólo repetimos verdades de otros.
—¿Y dónde escuchaste una verdad tan ridícula?
—En un Museo. Es más, si querés te puedo nombrar un pariente dinosaurio por cada letra del alfabeto.
—Bien, te desafío a que lo hagas. Si lo lográs te dejo libre, pero si no te como de un bocado.
—Bien, acepto el reto.
Novedades en Editoriales Libro%
La vida, la novela y el amor
La novela es un amor a primera vista entre algo que nos llamó la atención hace dos...
Tiempo de hablar y escuchar
La palabra nace antes que nosotros. Nos antecede y nos acompaña, pero no basta con...
Una película es todo el cine
Los amantes, dice John Berger, plantean una tregua frente al dolor del mundo....
Raúl
Abrir la puerta para salir a jugar. ¿Se acuerdan de cuando éramos chicos? Hacerse...